

Por Esmirna Gómez.-
Santo Domingo Este. – La Casa Arquidiocesana María de la Altagracia se convirtió en un signo de comunión eclesial con la celebración del noveno aniversario de Monseñor Francisco Ozoria como Arzobispo Metropolitano de Santo Domingo. Obispos, sacerdotes, religiosos y laicos provenientes de distintas diócesis de la Provincia Eclesiástica de Santo Domingo participaron en una jornada que estuvo marcada por la oración, la fraternidad y la acción de gracias.
Delegaciones de Baní, Barahona, San Juan y la recién erigida diócesis de Stella Maris, junto a representantes de otras iglesias particulares, se unieron para vivir una experiencia de unidad eclesial. El encuentro inició con la inscripción y la animación de cánticos, seguido de un momento de oración que dio paso a la presentación de los prelados, entre ellos se encontraban Mons. José Dolores Grullón Estrella, Andrés Napoleón Cárdenas, Fausto Burgos Brisman, Rafael Leonidas Felipe Núñez, Ramón Benito Ángeles, Manuel Antonio Ruíz de la Rosa, Loranzo Vargas. .
Uno de los puntos más significativos fue la intervención del padre Miguel Amarante, Vicario pastoral Arquidiocesano, quien explicó la distribución de las vicarías territoriales, resaltando el valor pastoral de la nueva diócesis Stella Maris, acompañada de su obispo electo, Monseñor Manuel Ruíz.

La campana del recinto convocó luego a la celebración Eucarística, presidida por Monseñor Ozoria. En su homilía, el Arzobispo agradeció a Dios por estos nueve años de servicio destacando la riqueza de la Provincia Eclesiástica de Santo Domingo, conformada por la arquidiócesis y sus seis diócesis la de San Juan, Barahona, Baní, La Altagracia, San Pedro de Macorís y Stella Maris.
“La provincia eclesiástica es un signo de unidad y misión. Cada diócesis conserva su identidad, pero todas convergen en un proyecto común de comunión sinodal”, expresó Mons. Ozoria.

En su mensaje, subrayó que el espíritu de la Iglesia dominicana se ha fortalecido en la creación de nuevas vicarías y diócesis, recordando que “dividir no es para restar, sino para multiplicar”, en referencia a la expansión de las estructuras pastorales.
Con esta conmemoración, Monseñor Ozoria renovó su entrega pastoral agradeciendo el acompañamiento recibido durante estos nueve años, reafirmando su visión de una Iglesia de comunión, participación y sinodalidad.